Yo utilizo las hojas del limonero, pero puedes utilizar cualquier otra que sea dura, procura que tengan todas el mismo tamaño más o menos, pero lo fundamental es que tengan rabito, para que las puedas pintar bien de chocolate y después las puedas desmoldar con facilidad.
Enjuaga las hojas del limonero para quitar cualquier impureza que puedan tener y las secas bien.
Funde el chocolate fondant al baño maría, pero solo un poco para dar la primera capa a las hojas.Pinta el envés de las hojas con un pincel, pero no le pintes el rabo y deja enfriar en el frigorífico sobre una bandeja, al menos durante 1 hora.
Vuelve a fundir un poco de chocolate al baño maría y da una segunda capa de chocolate.
Mete de nuevo en el frigorífico y desmolda cuando estén totalmente duras, tirando suavemente del rabito.
Una vez que las desmoldes las pones en una fuente tapadas con papel film en el frigorífico para que se conserven mejor. Yo las hago de un día para otro para que queden bien firmes y duras. Estas son para la TARTA DE TRES CHOCOLATES que puse ayer.No las presento sobre la tarta hasta la hora de servir, porque cogen un poco de humedad de la tarta y se resblandecen un poco.
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Hola querida Aurora, que buen consejo el de las hojas de chocolate, quedan preciosas, a tener en cuenta para adornar cualquier postre!!!
ResponderEliminarUn abrazo guapa.
Aurora, esas hojas te han quedado perfectas, me encantan, en cuanto a la tarta tiene que estar buenisima, muchos besos y feliz año
ResponderEliminarMuy interesante las hojas de chocolate :)
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